

El autor de la novela "La Semana", René Peguero Rodríguez atraves de Club Rotario Santo Dominfo Mirador, nos ha donado 100 ejemplares para contribuir a los proyectos del Club Rotario Santo Domingo Innovador en la Comunidad de Las Malvinas II.
El pensamiento toma su forma en las palabras como el agua en la vasija. Pero el destino de la palabra es la constante profanación. Tal vez la primavera inocule, además de un batallón de alergias, cierta desconfianza por el sentido expreso de conceptos apropiados y reciclados. Quizás el clima sea el mejor abono para la contingencia o para un “microacto político”. Por azar –muchas veces, casi siempre– se descubren libros que están destinados para uno. Pues bien, hoy la Alianza de Editores Independientes de la Argentina por la Bibliodiversidad inaugura una celebración atípica, un picnic de lectura y suelta de libros, que tendrá como punto principal de reunión la plaza San Martín. Entre las 16 y las 18, escritores, editores y lectores invitarán a traficar libros gratuitamente. Alguien soltará un libro querido en cualquier espacio público –si no puede arrimarse hasta Retiro– para encontrarse con otro libro querido, pero soltado por otro. Este trueque sucesivo en tiempo y espacio expande la multiplicidad de las lecturas y la viralidad de la misma acción de desprendimiento. La movida, que se celebrará simultáneamente en diez países de América latina, se llama el DíaB, por el Día de la Bibliodiversidad, palabra embrollada que, traducida al “lenguaje de a pie”, sería la diversidad cultural aplicada al mundo del libro. Esto es, la defensa de un variado repertorio de voces y el acceso universal a la información y al conocimiento.
Constanza Brunet, de la editorial Marea, desmenuza ante Página/12 por qué se decidió “soltar” libros y festejar por primera vez el DíaB justo en el arranque de la primavera en el Hemisferio Sur. “Esta estación evoca la variedad, el contraste de colores, el reverdecimiento, la transición, el anuncio de lo nuevo. Si bien la idea es que este día sea internacional, el Sur connota la posición de periferia del sentido de circulación de las ideas en un mundo globalizado”, subraya la editora. “Invitamos a soltar los libros en cualquier lugar público: el banco de una plaza, en un medio de transporte público, en un local de comidas rápidas, en un mostrador de un negocio, donde sea. La idea es hacer una pequeña intervención urbana, generar una escena disruptiva en medio de la cotidianidad de una ciudad; que encontrarte el libro, además de ser un regalo inesperado y la posibilidad de leerlo, se convierta en un disparador para imitar el acto de la suelta y reflexionar sobre el libro como un objeto portador de cultura y no una simple mercancía.”
Además de soltar libros de Marea, Brunet confiesa que también se animará a desprenderse de libros de su biblioteca personal, “leídos y marcados por mí”, aclara con la devoción del lector que deja la “huella dactilar” en las páginas. “Prefiero soltar los libros que leí recientemente, que me gustaron y que puedo volver a comprar. Lo admito: no me resigno a perderlos para siempre.” La editora de Marea anticipa para los sabuesos que circulen por las calles de Buenos Aires que dejará en algún lugar –cuyas señas no se puede ni debe precisar para no aguar la sorpresa del encuentro–, libros de editoriales independientes: Recorre los campos azules (Eterna Cadencia), de Claire Keegan; En otro orden de cosas (Interzona), de Fogwill, y Varadero y Habana maravillosa (Tamarisco), de Hernán Vanoli.
La propuesta de convertir el 21 de septiembre en el Día Internacional de la Bibliodiversidad es una iniciativa de la Alianza Internacional de Editores Independientes que será elevada a la Unesco. “El establecimiento de un día especial es un proceso complejo que encarará la Alianza. Muchas de las acciones que estamos haciendo en los distintos países de habla hispana formarán parte de la presentación del proyecto”, explica Brunet. En este primer festejo la red hispanohablante de la Alianza Internacional de Editores Independientes –asociación sin fines de lucro que se ocupa de una red compuesta por 80 editoriales y colectivos de editores de 45 países– será la pionera en realizar actividades promocionales en varios países: Perú, Chile, Colombia, México y Bolivia. En otros países, en los que no existen colectivos de editores independientes pero sí editoriales miembros de la Alianza –Uruguay, Ecuador, Guatemala y España–, también habrá sueltas de libros en apoyo al Día de la Bibliodiversidad.
En el “manifiesto” que puede encontrarse en Internet, los editores independientes cuestionan las formas de circulación tradicional de los libros como mercancías. “No nos oponemos al mercado, pero no funcionamos en términos de adaptación sin que nuestros proyectos pierdan vitalidad”, plantean. ¿Cómo consiguen ganar vitalidad o mayor visibilidad dentro del mercado del libro en el que participan? “En términos de mercado, proponemos editar libros concentrándonos en la oferta y no en la demanda”, responde Brunet. “Las grandes editoriales editan respondiendo a la demanda, muchas veces identificada con estudios de mercado o con olfato editor. Así, publicar simplemente es ofrecer productos de rápida venta que respondan a una moda existente. A la inversa, el editor independiente aspira a participar en lo más rico que tiene una cultura, que es lo emergente; de ahí que su catálogo sea también una creación. La existencia de la edición independiente es la garantía de bibliodiversidad, de búsqueda, de experimentación, de oposición a la cultura dominante como única opción cultural. Prueba de ello es la práctica habitual en las grandes editoriales de ‘robar’ autores a las editoriales independientes una vez que éstos han alcanzado notoriedad, es decir una vez que empiezan a incorporarse a la cultura dominante. En ese sentido, funcionamos como una suerte de ‘laboratorio de experimentación’ para el mundo de la edición. Esa es nuestra debilidad y nuestra fortaleza”, admite.
La suelta de libros como símbolo es la punta de un recordatorio. “Aunque habitualmente encontremos los libros en una librería a determinado precio, no se trata de mercancías como cualquier otra; es un objeto portador de cultura donde circulan las ideas, la literatura, el conocimiento. Y ésa es la esencia de la bibliodiversidad”, sintetiza Brunet. “Si el libro fuera sólo una mercancía, como editores sólo deberíamos optimizar la ganancia y apostar por aquellos autores y libros ya consagrados o temas comerciales que nos garanticen una venta alta. En un mundo así, el panorama cultural se vería empobrecido casi hasta la miseria. Por eso apoyamos la circulación alternativa del libro. La suelta de libros es una actividad cultural pero también lúdica, que ya viene haciéndose en muchos países, que puede hacer cada uno en su lugar, que implica participación colectiva. Un microacto político”, define la editora.
“El concepto de bibliodiversidad va mucho más allá de la suelta a la que tomamos como una herramienta más de concientización”, advierte Brunet. “La instalación de un día de la bibliodiversidad apunta a darle visibilidad a este concepto, dar visibilidad al trabajo de las editoriales independientes, que habitualmente está en un segundo o tercer plano. Transmitir fundamentalmente a los lectores, pero también a los autores, los periodistas, los libreros, los funcionarios vinculados con políticas culturales, los bibliotecarios, la importancia de entender el funcionamiento del mercado editorial y actuar contra la concentración y la mercantilización del libro.”
Fuente:
http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/espectaculos/17-19340-2010-09-21.html
Enlace relacionado:
http://www.servicios.clarin.com/notas/jsp/enie/v1/notas/imprimir.jsp?pagid=2207885
Amigos de YLEL Mileny, Francisco y Anabell
El pasado 01 de julio y con el libro Mi Tío el Empleado nuestro club de lectura inició sus interesantes y gratos encuentros. Wilmy uno de nuestros amigos, aunque no estuvo presente pues vive en el interior del país, le dio seguimiento a nuestra lectura y se animó a enviarnos su opinión sobre el libro....
Esta novela trata sobre la vida de Vicente Cuevas contada por su sobrino Manuel. Nos relata la aventura que este emprendió hacia la Habana, Cuba, con una carta de recomendación del Señor Marqués de Casa-Vetusta y con el sueño y juramento de que será algo. Esta basada en dos partes, la primera en la que Vicente no es nada más que un simple peón de Don Genaro, el cual, al ver la carta de recomendación que este traía y lo tonto que era decide usarlo para su propósito personal. Y la segunda parte en la que Vicente después de escapar de Cuba como exiliado con la ayuda de Don Genaro vuelve como el excelentísimo Conde Coveo.
Mi Opinión.
Me gusto la historia de Vicente. Quien pensaría que esta novela está basada en una historia real de la vida, pero cuando hay corrupción cualquier cosa puede pasar. Con el personaje que más me identifico es con Manuel, aunque lamentablemente no se hablo casi nada de él en la segunda parte de la historia. Lo que me llevo a preguntarme como el sobrino del Conde sabia todo lo que este hacia, ya que en la segunda parte de esta historia el estaba completamente separado de su tío. Creo que el que mantenía informado a Manuel de todo era Don Mateo ya que él estaba siempre con el Conde y sabia todo lo que este Hacia.
Frase favorita:
“Oh!, sí; me casaré, me casaré. Eso es lo que me falta. Una mujer hermosa cuya sonrisa vea yo al despertarme, cuyos ojos iluminen este cuarto con más dulce claridad que la del Sol, cuyo aliento perfume y vuelva más sutil esta enervante y pesada atmósfera. ¡Oh!, sí; una mujer bella que alegre con su presencia y con su argentina voz, como jilguero en dorada jaula, está desierta casa.
Esta foto fue enviada por Lennis Núñez, quien dejó uno de los libros en Bávaro-Punta Cana, específicamente en la concurrida intersección Cruce de Verón.
Muchas gracias a todos y nos vemos en la próxima reunión!
Hace unas semanas atrás el programa radial Biblioteca En El Aire nos invitó para que habláramos de nuestro movimiento y club de lectura. Un oyente, mientras estábamos en el aire, llamó al programa y nos contó que años atrás había escuchado algo referente al movimiento. Elizardo se presentó al programa, tuve el placer de conocerlo y que me contara con mas detalles toda la historia, así nos la cuenta a todos nosotros....
Una Anécdota de Libros y de Hallazgos:
Sin proponérmelo, mientras leía un periódico digital, me hallé con una idea interesante. Se trataba de la propuesta de poner libros leídos al alcance de cualquier persona interesada; una persona desconocida; un transeúnte. Un pasajero que no advierta que alguien como yo, pensó en la casualidad de enroscarme a su voluntad, y hacerle leer uno de mis libros. Me pareció excelente la idea de dejar libros en un lugar público para que otras personas los leyesen. Aquél era el marco de la propuesta. Yo me decidí.
Se trataba de algo que ya había venido haciéndose en varias ciudades del mundo. Pensé para mis adentros: ¡Ésta es una idea loquísima! ¿Por qué no…?
Me entusiasmé, y decidí comunicárselo a algún que otro amigo que compartiera conmigo esta locura de multiplicarme y enlazarme con otros de aquella manera. Lo hice. Me dediqué a pensar en cuáles libros, y entendí, que lo mejor era alguna que otra lectura interesante, de ésas que apasionan en Reública Dominicana. Dentro de mi biblioteca busqué un par de novelas sobre Trujillo, y un libro sobre historia dominicana. En la primera página, antes de la falsa portada, escribí:
Este libro era de mi propiedad. Ahora es tuyo mientras lo leas. No se me perdió. A propósito te lo dejé a ti. Cuando lo hayas leído, por favor, sigue la cadena. Déjaselo a otra persona como tú, diciéndole esto mismo. Adelante. ¡Atrévete!
Me dirigí en solitario al Parque Colón, en el centro histórico de la ciudad de Santo Domingo. Me senté en el quicio de una de las puertas laterales de la Catedral, adonde sé que siempre va mucha gente. Guarnecido de la lluvia, dejé uno de mis preciados libros. Me deshice de él, en espera de que alguien lo encontrara e hiciera lo mismo que yo. Otro tanto hice con los demás libros en otros lugares del Parque.
Un sentimiento ambivalente, de haber perdido algo y de haber ganado un amigo en las penumbras, me invadió el espíritu. Sé que hice algo bueno, porque ni me he arrepentido ni he sentido que perdí mi tiempo. Sé que alguien lo tomó. A lo mejor, esa persona siguió la cadena, y yo, como un eslabón perdido de ella, no he vuelto a formar parte de sus otros eslabones. De eso hace cuatro años. Muchas veces, durante las tardes de sol, me aproximo a aquel lugar. Miro las viejas paredes centenarias, y espero con vaga ansiedad, por aquel lector de libros al que no conocí nunca. A lo mejor él es cualquiera que ahora pueda estar leyendo estas notas. A lo mejor, él o ella, también me busque entre la multitud, intentando seguir con la cadena que ingenuamente inicié aquella tarde. Sé que no perdí; gané.
Elizardo Puello.
Gracias Elizardo por enviarnos tu anécdota y tu expreso apoyo y entusiasmo a nuestro grupo.
La celebración de la Primera Jornada de Yo Leí este Libro en Santo Domingo trajo consigo experiencias enriquecedoras y que nos alientan perseverar en la promoción de la lectura en República Dominicana.
Una de esas buenas noticias fue la invitación que nos hiciera el Sr. Freddy Armando, director del Plan Quinquenal del Libro y la Lectura, del Ministerio de Cultura para ofrecer su apoyo a las actividades de YO LEÍ ESTE LIBRO. La sorpresa de la reunión fue la donación de 40 obras literarias tituladas Cinco Cuentos, del célebre dominicano Juan Bosch, y Mi tío el empleado, del autor cubano Ramón Meza, ésta con un prólogo de José Lezama Lima.
Las obras del Bosch serán distribuidas en la segunda jornada del movimiento que se realizará próximamente en sectores de escasos recursos de la provincia Santo Domingo.
Mi tío el empleado, considerada como una de las principales novelas de la narrativa cubana será cedida a los miembros de nuestro del Club de Lectura YO LEÍ ESTE LIBRO. Una vez concluida la sesión de esta obra en el Club, la novela será dejada en las calles del país para que otras personas continúen la lectura, respondiendo a la mística del Movimiento.
Los interesados en participar en el Club de Lectura YO LEÍ ESTE LIBRO deberán escribir al siguiente correo electrónico: yoleirepublicadominicana@
La Sombra del Viento, de Carlos Ruiz Zafón, inauguró la Primera Jornada YO LEÍ ESTE LIBRO República Dominicana, el pasado fin de semana. La obra fue dejada al pie de las escaleras automáticas de la Plaza Bolera, con la esperanza de que un ciudadano la encuentre, la lea y deje por otro sendero para continuar la cadena de lectura.
A las cuatro y media del sábado emprendimos el recorrido por las avenidas Abraham Lincoln, Roberto Pastoriza, Winston Churchill y sus calles perpendiculares. En total se distribuyeron 24 obras de Johann Wolfgang von Goethe, Ramón Emilio Moreno, Diógenes Céspedes, Juan Bosch, Vicente Pardú, Dulce Chacón, Miguel de Cervantes , entre otros.
Las vías de la jornada -de las más transitadas de la capital- acogen centros comerciales, supermercados, bares, restaurantes y tiendas de ropas y accesorios. No hubo se escatimó imaginación, así que los libros llegaron hasta los cajeros automáticos de la zona.
Les recordamos que este movimiento es libre y que cualquier persona puede tomar la iniciativa de dejar un libro, solo tienen que descargar las reglas y pegarlas a los libros que distribuyan. A las personas que se animen, les invitamos a enviar sus imágenes a nuestro correo electrónico y así compartir con todos nosotros sus experiencias.
Primero que todo, me ha gustado mucho la idea de la iniciativa "Yo Leí Este Libro". Es una forma muy eficaz de impactar a mucha gente de una manera indirecta, y a la vez inyectar hábito de lectura en muchas personas.
Me acuerdo que en un hotel de Estados Unidos me encontré con un Libro de Milán Kundera que tenía los pasos de "Yo Leí Este Libro" y la idea me impresionó. Ahora me Impresiona mucho mas al verla aquí!!!!
Soy de Santiago de los Caballeros y me gustaría saber si ustedes tienen personas que estén trabajando con esa idea aquí?, Si es así, me les puedo unir?, Si no es así, puedo yo organizar una Jornada?
Gracias de antemano y apoyo al 100% su proyecto!
Melvin R. Martínez
Pues a raíz de este motivador mail ,y del entusiasmo de Melvin, ya estamos pensando en una jornada para Santiago, mas adelante daremos los detalles.
Gracias Melvin por tu ofrecimiento y apoyo.